Liqui Moly 1597
Maddox Detail
Motul
Sisbrill V60 Sport
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Repara arañazos
Bienvenido a nuestra sección de nuestra tienda online de limpiadores de llantas y neumáticos donde también encontrarás kits de reparación de arañazos para llantas. Te ofrecemos los mejores kits de limpieza para las llantas y ruedas de tu coche a precios baratos. Recuperarán ese brillo de cuando eran nuevos y ayudarán a que mantengan el brillo por mucho tiempo. Hemos seleccionado las mejores marcas de limpieza para ti y como siempre, al mejor precio.
Kits de limpieza para llantas y ruedas de coches
Si estás buscando el mejor limpiador de llantas de aluminio y piensas en marcas como Wurth, Norauto, Sonax, Sisbrill V60 Sport, Liqui Moly 1597, Motul, Maddox Detail Premium…no te preocupes, en nuestra tienda online encontrarás las marcas de mayor prestigio de limpieza de llantas y neumáticos de automóvil. Tenemos además ofertas especiales, por lo que no te olvides de visitar nuestra página de vez en cuando para no perderte los mejores precios en limpia llantas de alta eficacia.
La importancia de los limpia llantas
En ocasiones nos olvidamos del aspecto de las llantas y los neumáticos y simplemente nos dedicamos a limpiar la carrocería, pero un coche con las llantas negras desmerece mucho. Los túneles de lavado tienen la opción de limpieza de llantas pero si bien deja un aspecto adecuado, después necesita un buen repaso pues los cepillos automáticos no alcanzan la limpieza esperada. Por eso, el mayor truco de limpieza es utilizar productos específicos para esta parte del coche. Pero no olvides utilizarlos siguiendo las instrucciones pues los sprays necesitan un tiempo de aplicación para que la suciedad salga con más facilidad.
Un truco muy bueno, es aplicar el spray unos minutos antes de entrar al tunel de lavado por lo que la combinación de ambas limpiezas dejarán las llantas con un brillo increíble. Y recuerda, los precios de estos productos no son caros porque además duran mucho tiempo.
Cuidado de las llantas de aluminio
Cuando vamos a comprar un vehículo nuevo debemos tomar una serie de decisiones. Las marcas de automoción nos ofrecen ahora muchas posibilidades de personalización. Además de escoger un modelo determinado, podemos elegir el tipo de tapicería, los acabados interiores, el equipamiento de infotainment, el color del vehículo y, por supuesto, sus llantas de aleación.
Las llantas son una de las partes más atractivas de un coche. Pueden servir, por ejemplo, para resaltar el aspecto deportivo del mismo o pueden hacerlo, en su caso, para realzar su aire más señorial. En cualquier caso, sirven para mejorar el aspecto general del automóvil y para dar a éste un encanto especial. Es por eso por lo que, una vez comprado el vehículo, debemos velar para que las llantas se mantengan en buen estado. No hacerlo implica afectar directa y negativamente a la estética del coche.
Las llantas se ven sometidas a diario a múltiples agresiones. La de la meteorología es una de ellas. La lluvia, unida a la suciedad, es un elemento muy dañino. Puede ayudar a corroer las llantas. También lo es el polvo de los frenos. Así mismo, el roce con los bordillos también ayuda a dañarlas. Por eso es importante saber cuidarlas y, en su caso, poder hacer pequeñas reparacines que permitan mantenerlas atractivas y en buen estado. En este artículo vamos a darte una serie de consejos básicos para realizar un buen mantenimiento de las llantas de un coche y te vamos a enseñar una serie de trucos para repararlas cuando están levemente dañadas.
¿Cómo cuidar las llantas de aluminio?
Si queremos cuidar las llantas de nuestro coche lo primero que tenemos que hacer es realizar una limpieza regular de las mismas. Al limpiarlas, evitamos que se acumule en ella la suciedad. Ésta, combinada con la intensidad de la luz solar, acaba dañando al aluminio de las llantas de aleación.
Para limpiar las llantas de aluminio de un coche hay que emplear productos adecuados para ello. En nuestra tienda online se pueden encontrar limpiadores y champús de automóviles de muchos tipos. Entre ellos, seguro que hay uno creado especialmente para tu tipo de llantas. Comprar uno de una marca de garantía es una buena manera de garantizar un buen cuidado de las llantas. En cualquier caso, al comprar uno de estos productos tenemos que asegurarnos de que el producto en cuestión esté libre de ácido. El ácido puede dañar la llanta.
Una vez escogido el producto y las herramientas de limpieza (bayetas, gamuzas, etc.) que vamos a utilizar en la limpieza de las llantas hay que colocarse unos guantes y ponerse manos a la obra.
Para ello, debemos asegurarnos de que las llantas están frías. Cuando eso suceda, emplearemos agua limpia para limpiar la suciedad profunda y el polvo que haya podido acumularse sobre ellas. Cuando hay suciedad incrustada, lo mejor es echar mano de una limpiadora de alta presión. El uso de un aparato de este tipo permite, además, evitar la utilización de algún tipo de cepillo que, por su dureza o por mala praxis, podría acabara dañando las llantas. Si éstas estuvieran muy sucias y, al final, no quedara más remedio que tener que utilizar un cepillo, usaríamos siempre un cepillo de cerdas suaves. Lo aconsejable, en cualquier caso, es no utilizar durante demasiado tiempo el cepillo. Para los lugares de la llanta de difícil acceso podríamos servirnos de un cepillo de dientes.
Una vez eliminados los restos de suciedad de las llantas con el agua clara llegará el momento de utilizar el producto limpiador que hayamos comprado. Antes de aplicarlo debemos leer sus instrucciones de uso para saber el tiempo que debe estar aplicado el limpiador de llantas. Para evitar daños superficiales en las mismas y para mejorar su aspecto estético, el producto se debe aplicar durante el tiempo de exposición indicado en sus instrucciones de uso.
En algunas ocasiones, cuando la llanta está notablemente dañada por algunos de los factores indicados anteriormente, se recomienda el aplicar a la misma una capa de pintura. Pintar una llanta de aleación permite darle un aspecto nuevo. Al mismo tiempo, al pintarla la estamos sellando para, en la medida de lo posible, evitar que la suciedad se adhiera a ella. Para que la pintura se fije de forma adecuada debemos asegurarnos de desengrasar completamente la superficie de la llanta antes de pintar.
Daños que pueden repararse en las llantas de aleación
En algunas ocasiones, no basta con limpiar las llantas de un coche para que éstas luzcan perfectas. De tanto en tanto, aparecen en ellas pequeños daños que no desaparecen con una limpieza ni con el uso de un buen limpiador. Un arañazo hecho al rozar contra un bordillo, por ejemplo, no desaparece así como así. Hay que repararlo.
La reparación por nosotros mismos de un arañazo en la llanta será posible cuando dicho arañazo no supere el milímetro de profundidad en la base del metal y cuando se eliminen menos de 50 milímetros en la rueda exterior.
Cuando las medidas del daño superen los límites indicados, la estructura del material de la llanta habrá quedado afectada y la estabilidad de la rueda no estará garantizada. En ese caso, tratamientos de la llanta como el tratamiento térmico, la soldadura o la torsión con martillo quedarán absolutamente prohibidos.
Pasos para reparar los daños estéticos de una llanta
Si sigues los consejos que vamos a darte a continuación, tú mismo podrás reparar los daños de una llanta cuando éstos sean solo estéticos y no afecten a la estructura de la misma.
Para reparar una llanta necesitas usar diferentes materiales. Entre ellos figuran los siguientes:
- Paño de microfibra
- Cinta
- Limpiador neutro y algo de agua
- Papel de lija con tamaños de grano que oscilen entre el 200 y el 1.000
- Masilla especial para llantas de aluminio
- Pintura para llantas
Una vez tengas todos los materiales adecuados para la reparación y el mantenimiento de las llantas deberás seguir los pasos que vamos a indicarte a continuación.
- El primer paso, imprescindible, consiste en desmontar la llanta de aluminio. Tras desmontarla, la colocaremos en una superficie estable, sobre la que se pueda trabajar cómodamente, y la frotaremos con agua y con el limpiador.
- Una vez se haya secado por completo, iniciaremos el proceso de reparación de la llanta. Para ello, protegeremos en la misma la zona no afectada por el daño. Una vez hayamos protegido esa zona con la cinta, emplearemos la lija de grano más grueso para lijar las áreas afectadas. Una vez hayamos aplicado una lija, limpiaremos la zona lijada con agua y con la bayeta de microfibra.
- El paso descrito en el párrafo anterior lo iremos repitiendo con lijas cada vez más finas. Tras pasar cada una de las lijas, volveremos a limpiar la zona con la bayeta de microfriba y el agua limpia y sin productos, y lo haremos hasta que la superficie de la llanta vuelva a estar lisa.
- Una vez llegados a este punto, rellenaremos las grietas que aún queden con masilla para llantas de aluminio. Es muy importante, en esta fase, seguir al pie de la letra las instrucciones de uso que acompañan a este tipo de productos.
- Aplicada la masilla, hay que esperar que ésta se seque para, a continuación, lijar la zona en la que se haya aplicado. Para lijar esa zona hay que usar apel de lija húmedo y muy fino, ya que solo de esa manera podremos conseguir un acabado perfecto.
- El último paso a realizar para completar la reparación de los daños de una llanta de aluminio, una vez que esos daños superficiales se han eliminado, hay que aplicar la pintura correspondiente.
La pintura con la que pintar y sellar las llantas reparadas dependerá de éstas. Las llantas mates necesitan varias capas de pintura. Las llantas brillantes, por su parte, necesitan una o dos capas de pintura de su color y, a continuación, un barniz transparente que actúe como sellador.
Una vez la pintura y, en su caso, el barniz, se haya secado, ya se podrá montar de nuevo la llanta en el coche.
Reparación profesional de las llantas de un coche
El proceso explicado anteriormente sirve para reparar daños en una llanta de una forma casera. En ocasiones, sin embargo, las llantas deben ser reparadas de una manera más profesional y de una manera más mecánica.
¿Cómo actúan los talleres en estos casos? Para empezar, sujetan la llanta a una máquina creada originalmente para realizar este tipo de reparaciones. Una vez sujeta a esa máquina, la llanta se repara utilizando diferentes muelas abrasivas y una técnica de rectificado rotativo. Finalizado el proceso de reparación de la llanta, ésta se sella con color y con un barniz transparente.
Sin duda, este proceso profesional de reparación es más económico que la compra, siempre costosa, de una llanta nueva. Pero este proceso no sirve para todos los casos. Igual que el proceso manual descrito en el apartado anterior, éste sirve única y exclusivamente para aquellas llantas que, como mucho, tienen un daño máximo de hasta un milímetro de profundidad. Más allá de ese daño hay que comprar, sí o sí, una llanta nueva. Y es que la llanta está en contacto directo con la rueda y ésta, no lo olvidemos nunca, es un elemento principal a la hora de valorar nuestra seguridad al volante. Por eso el mantenimiento y cuidado de las llantas es una obligación que todo conductor debe contraer con su coche.
