Entre los argumentos que suelen emplearse para defender la compra de un coche en Alemania destaca, por encima de todos los demás, el de su precio. Damos por hecho que un vehículo comprado en el país germano es más económico. Pero… ¿por qué los coches importados son más baratos?
En este artículo vamos a dar respuesta a esa pregunta y vamos a exponer los motivos de esa diferencia de precio.
Uno de los grandes motivos tiene que ver con la característica principal del mercado de la automoción en Alemania: su volumen y movilidad.
En el país germano se matriculan anualmente algo así como el triple de vehículos que en España. Teniendo en cuenta que su población es alrededor del doble que en nuestro país, los datos indican que los alemanes cambian de coche más a menudo que los españoles.
Los datos hablan de que los alemanes compran un nuevo modelo de automóvil cada cinco o seis años. Eso libera una buena cantidad de vehículos que pasan a engrosar el catálogo del mercado de coches de segunda mano, que se vuelve así muy interesante y atractivo para las personas que llegan de otro país con la idea de comprar un coche de ocasión de gama media/alta y de un marca premium como Mercedes Benz, BMW, Audi o Porsche.
Muchas de esas personas, además, llegan de países en los que los coches están fuertemente gravados por impuestos. Al no darse esa situación en Alemania, los vehículos de segunda mano que se ofertan en sus concesionarios o en sus campas se pueden ofrecer a mejor precio.
Facilidades de pago
Otro de los motivos de por qué los coches importados de Alemania son más baratos tiene que ver con el hecho de que el país germano es una potencia mundial como fabricante de automóviles.
En ciudades como Wolfsburgo, Munich, Ingolstadt o Stuttgart se encuentran las principales fábricas de marcas como Volkswagen, BMW, Audi o Mercedes. Estas empresas acostumbran a ofrecer grandes descuentos a sus empleados. Estos, así, pueden adquirir vehículos de gama media/alta hasta un 25% más baratos que los compradores que no pertenezcan a la plantilla de dichas fábricas.
Con esas facilidades, los empleados de estas marcas premium de automoción pueden cambiar de forma más habitual de coche. Así, los vehículos que dejan pasan a engrosar el mercado de segunda mano a un precio muy atractivo para los compradores. Dirigirse a los concesionarios de las ciudades nombradas facilita el encontrar precios más reducidos en coches usados.
Coches alemanes no comercializados en España
Un último motivo que explicaría por qué pueden encontrarse vehículos baratos de marcas premium en Alemania es porque esas marcas comercializan en su país versiones básicas que no están disponibles en el mercado español.
Un ejemplo recurrente al hablar de esto es el del Mercedes GLA. Este modelo se comercializó tanto en Alemania como en España, pero en nuestro país no podía comprarse equipado con faros halógenos. Lo mismo sucedió con versiones básicas de entrada de modelos como el Audi A3, A4 y A6. Así, una buena forma de adquirir un coche de estos tres modelos a un precio barato es acudir al mercado alemán de segunda mano y comprar la versión básica de algún modelo de alguna marca premium.
Otros gastos en la compra de un coche usado
Quien desee importar un coche de Alemania debe tener en cuenta, a la hora de valorar los gastos totales de la compra e importación que no solo el precio del coche escogido importa. La importación de un coche comprado en Alemania está sujeta al pago de una serie de impuestos, tasas y gravámenes que, en buena medida, dependen del modelo a importar.
En nuestro artículo ¿Qué impuestos se pagan al importar un coche de Alemania? hablamos con detalle de todos esos impuestos en tasa. Nos limitaremos aquí a citar los más importantes: impuesto de matriculación, inspecciones técnicas del vehículo (en Alemania y en España), impuesto de circulación y, en caso de que el coche elegido sea comprado a un particular, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales. Junto a estos gastos también podemos destacar el destinado a comprar las placas de matrícula provisionales que deben servir para que el vehículo pueda circular hasta que disponga de sus propias matrículas españolas oficiales.
Pese a todos estos gastos, en muchas ocasiones siguen siendo más baratos los coches importados. En este artículo hemos intentado explicarte el porqué.
