Mercedes Benz ha apostado por la electrificación. Lo demuestra la familia EQ. En esta familia caben los coches híbridos, que combinan un motor de gasolina y un motor eléctrico, y también, por supuesto, los vehículos totalmente electrificados. A este último subgrupo pertenece el Mercedes EQC, el primer SUV eléctrico de la marca.
La producción del Mercedes Benz EQC se iniciará en la primavera del presente año y será en junio cuando se inicien, de manera oficial, las ventas del mismo. De momento no se conoce el precio de este todocamino eléctrico de la marca alemana.
Diseño exterior del Mercedes EQC
Con una longitud de 4,76 metros de largo, el EQC se sitúa, por tamaño, entre el Mercedes GLC y el Mercedes GLE.
El modelo presenta un nuevo frontal que, bautizado como “Black Panel”, estrena una línea de fibra óptica que sirve para unir ambos faros. Esa línea, da la sensación visual de ser una banda luminosa horizontal a lo ancho de todo el coche.
El frontal, acabado en negro brillante, contrasta marcadamente con los faros del vehículo. Dicho contraste otorga a este SUV de lujo una estética muy personal. Al parecer, ésa será la estética que predomine en los próximos modelos de la familia EQ.
El contraste cromático exterior es una de las características estéticas de este modelo. Tanto en la carrocería como en las llantas y en los faros podemos contemplar una llamativa combinación de franjas azules sobre fondo negro.
Ese contraste entre las franjas azules y el fondo negro no es, sin embargo, exclusivo del exterior del vehículo; también se da en su interior. En éste, las líneas azules contrastan sobre fondos tanto negros como cromados.
Interior del Mercedes-Benz EQC
En el interior de este vehículo destaca, más allá de la elegancia estilística de todo el diseño, la doble pantalla central. En esta pantalla, de 2 x 10,25 pulgadas, se centralizan los mandos de control de todo el vehículo, tanto informativos como de operación, así como los referentes al asistente virtual.
Una de las novedades que el conductor puede encontrar en este SUV eléctrico es el sistema Mercedes-Benz User Experience o MBUX.
El MBUX es un sistema de información y entretenimiento que permite al conductor del modelo EQC conocer el flujo eléctrico, el estado de la carga y la autonomía del vehículo.”
Gracias al sistema MBUX el conductor de un vehículo de este tipo podrá conocer también dónde podrá encontrar una estación de carga. Dicha información servirá para planificar la ruta y, muy seguramente, para ahorrar.
El Mercedes EQC incorpora también un sistema de reconocimiento de voz con inteligencia artificial. Éste, basado en ‘Linguatronic’, sirve para activar una serie de funciones con el uso de la voz.
Gracias a este sistema, el conductor de este SUV eléctrico de Mercedes Benz puede activar las luces, el equipo de aire acondicionado, escribir y enviar mensajes o, por ejemplo, llamar por teléfono, entre otras funciones.
Motorización del EQC
La característica principal, mecánicamente hablando, del Mercedes-Benz EQC consiste en la incorporación de la nueva plataforma eléctrica eATS. Esta plataforma o motor consiste en un sistema de propulsión de cadena cinemática eléctrica compacta.
Este SUV 100% eléctrico consta de dos de estos motores eléctricos, uno en cada eje. La configuración de estos dos motores permite conseguir un equilibrio óptimo entre dinamismo y consumo energético.
Entre los dos propulsores consiguen desarrollar una potencia máxima aproximada de 300kW. Gracias a dichas prestaciones, este modelo puede acelerar de 0 a 100 Km/h en 5,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima, limitada electrónicamente, de 180 km/h.
La batería del EQC, por su parte, está situado en la parte baja del vehículo, entre eje y eje. Es una batería de iones de litio, tiene una capacidad de 80 kWh y pesa unos 650 kilos.
La autonomía de la batería del primer SUV eléctrico de Mercedes es de 450 kilómetros. La marca de la estrella, segura de la fiabilidad y de la calidad de esta batería, ofrece una garantía al comprador de uno de estos vehículos de 160.000 kilómetros o de ocho años.
Modos de conducción del Mercedes EQC
Por su parte, el consumo y la potencia de este modelo depende en gran medida del modo de conducción que se elige entre los cinco disponibles.
Los modos de conducción del primer SUV eléctrico de la marca de la estrella son los siguientes: ‘Comfort’, ‘Eco’, ‘Max Range’, ‘Sport’ y un modo personalizado por el usuario. Este último modo de conducción es, por decirlo de algún modo, una especie de austoescuela.
En este caso, es el propio sistema del vehículo quien enseña al conductor del mismo a conducir de una manera económica. Para conseguirlo, el conductor del EQC deberá aprender a utilizar correctamente el pedal de acelerador háptico y a escoger con tino los momentos en los que utilizar el freno regenerativo.
Una de las claves de las que depende y dependerá el éxito de los coches eléctricos es el tiempo de carga de los mismos. Para agilizar esa tarea y reducir el tiempo de carga, Mercedes-Benz se ha propuesto crear una serie de estaciones que recibirán el nombre de Mercedes-Benz Wallbox. Según afirma la marca alemana, estas estaciones tardarán en cargar una batería un tercio del tiempo de lo que tarda en hacerlo un sistema básico de carga doméstica.
Para poder ser cargado tanto en casa como en estaciones de carga pública, este SUV eléctrico posee un cargador OBL refrigerado por agua con potencia de 7,4kW y que permite la carga de la batería del vehículo con corriente alterna.
El EQC es compatible con la red europea IONITY. Esta red nace de la asociación entre BMW Group, Daimler AF, Ford Motor Company y el Grupo Wolkswagen y tiene un objetivo de cara al 2020: abrir unas 400 estaciones de carga rápida.