La historia de Porsche ha sido siempre la historia de una continua renovación. Renovarse, de hecho, es la mejor forma de subsistir. La marca alemana lo ha tenido que hacer varias veces a lo largo de su historia. Lo hizo al comercializar el Porsche Cayenne y lo hizo también, a mediados de los noventa, al lanzar al mercado el Porsche 993.
El 993 fue la cuarta generación del Porsche 911 y se fabricó entre octubre de 1993 y principios de 1998. De su anterior generación solo conservó las puertas y la tapa del maletero. La plataforma era completamente nueva y sobre ella se asentó una carrocería más aerodinámica.
El diseño exterior de esta nueva generación del 911 se caracterizaba por poseer una mayor inclinación de los faros elipsoidales y por la forma redondeada de los parachoques. Éstos, además, no sólo contribuían a mejorar el flujo de aire alrededor del vehículo. También redirigían ese el flujo de aire para refrigerar con él algunas zonas del freno y el motor.
El Porsche 993 incluía también un alerón trasero móvil de control electrónico. Gracias a dicho alerón, el vehículo conseguía un mayor poder de sustentación a grandes velocidades.
El fabricante germano consiguió también imprimir un nuevo diseño al interior de la nueva generación de vehículos. En cierto modo, el interior era lo que menos había evolucionado en la gama desde la primera generación del Porsche 911. En el caso del 993, la marca de Stuttgart optó por rediseñar asientos, salpicaderos, sistemas de refrigeración y volantes. Éstos, por vez primera, incluían el airbag de serie.
Mecánica de la cuarta generación del Porsche 911
El motor de los vehículos de la cuarta generación del 911 disponía de nuevos pistones, cigüeñal y de materiales ligeros como el magnesio o el aluminio. Eso, unido a una nueva generación de gestión electrónica del motor, permitía a dicho bloque mecánico desarrollar una potencia máxima de 272 CV.
Esta cuarta generación del mítico modelo fue la última en disponer de motores refrigerados por aire. La siguiente generación del 911 ya vendría equipada con motores refrigerados por agua.
La firma alemana permitía también que el futuro propietario del 993 eligiera entre conducir un vehículo con una caja de cambios manual de seis velocidades o una automática de cuatro.
En este último caso, se podía cambiar de marcha mediante el selector ubicado en la consola central o mediante dos pulsadores que estaban colocados en el volante.
Esta nueva generación incorporaba, también, nuevas suspensiones. Los cambios más radicales respecto a las generaciones anteriores se efectuaron en el tren trasero. Éstos incorporaron una configuración muy cercana a la que poseían los modelos de competición.
El reposicionamiento de muelles y amortiguadores, unido a ese cambio de configuración, permitía una más suave conducción y un mayor control sobre el eje trasero.
Los frenos del Porsche 911 993 incorporaban la última evolución del sistema ABS diseñado por Bosch.
Modelos del Porsche 993
Entre los diferentes modelos de esta cuarta generación del 911 podemos destacar los siguientes:
- El 911 Carrera 3,6 Coupé. Éste fue el primer modelo de esta generación. Este vehículo podía acelerar de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos gracias a su potencia máxima de 272 CV. La velocidad máxima que podía alcanzar este vehículo, que pesaba 1.370 kg, era de 267 km/h.
- La versión Cabrio del modelo anterior. De este nuevo modelo no saldría, como en generaciones anteriores, una versión Targa, pero sí que se produjeron variantes de tracción total, el Carrera 4 3,6 Coupé y el Carrera 4 3,6 Cabrio.
- Porsche 911 Turbo 3,6. Esta versión turboalimentada empezó a venderse en abril de 1995. Esta versión alcanzaba una potencia de 408 CV y una velocidad máxima de 290 km/h. Un vehículo de este tipo tardaba en pasar de 0 a 100 km/h sólo 4,3 segundos.
- 911 GT2. Con el mismo motor de la versión turbo, el 911 GT2 estaba sobrealimentado por dos turbocompresores de la firma KKK. Esto, unido a la reprogramación electrónica, permitía a este modelo el alcanzar una potencia máxima de 430 CV.
Los modelos del Porsche Carrera
Aparte de los modelos citados anteriormente, encontramos también en esta gama los siguientes modelos del Porsche 911 Carrera:
- 911 Carrera RS 3,8. Para aligerar de peso a esta variante del 993, los ingenieros de la firma alemana eliminaron en él los asientos traseros y el aislante acústico. Su alerón trasero no era retráctil, sino fijo y poseía unas aletas ligeramente sobredimensionadas. La potencia máxima de este modelo era de 300 CV y su velocidad máxima, de 277 km/h.
- 911 Carrera RS 3,8 Clubsport. Homologado en Europa para circular por carretera, su uso estuvo destinado casi exclusivamente a la circulación en circuito. Sin elevalunas eléctrico, sin aire acondicionado, sin enmoquetado interior y sin radio, a este modelo se le montaba un arco antivuelco soldado a la carrocería.
En agosto de 1995, la firma de Stuttgart incorporó el sistema de admisión Variocam al propulsor de este último modelo y nuevas válvulas de admisión. Al incorporar estas novedades, los vehículos de las cuatro versiones (911 Carrera 3,6 Coupé y Cabrio y 911 Carrera 4 3,6 Coupé y Cabrio) ganaron en potencia y en velocidad máxima.
Otra variantes del Porsche 993 fueron el 911 Carrera 4 S 3,6, el Porsche 911 Targa 3,6, el 911 Carrera S 3,6 de propulsión y el 993 Turbo S 3,6, que sería el máximo exponente de esta última generación que poseía un motor bóxer refrigerado por aire.